Si estos días casi nos estamos ‘hartando’ de ver machadas desde todos los puntos del planeta sobre auténticas locuras en balcones de cinco metros y en apartamentos que no superan los 60 metros cuadrados, lo que se ha propuesto el triatleta Jan Frodeno supera todos los límites habidos y por haber. Estamos hablando seguramente del mayor reto jamás visto a nivel casero: completar un IRONMAN confinado en su casa. “Quiero nadar 3,8 kilómetros, hacer en bicicleta 180km y correr un maratón. Todo en casa entre el amanecer y el atardecer”.
TRIPLE CAMPEÓN DEL MUNDO DE IRONMAN y CAMPEÓN OLÍMPICO
El campeón del mundo de IRONMAN en 2015, 2016 y 2019 y campeón olímpico en 2008 ha sido el único mensaje que ha dejado al respecto y ha intrigado sobremanera al mundo del deporte porque, directamente, nadie cree que eso vaya a poder ser posible. Un maratón con la cinta, 180 kilómetros con el rodillo que tiene en casa y 3,8 kilómetros en la pequeña piscina de la que dispone el triatleta alemán, uno de los mejores de todos los tiempos y uno de los deportistas más mediáticos de la actualidad.
El desafío se podrá seguir en sus redes sociales y destinará los ingresos que genere a a lucha contra el coronavirus. Se da el caso de que Frodeno tiene fijada su residencia en Girona, donde va a acometer ese reto. De hecho, ha recibido varios homenajes por parte del ayuntamiento de la localidad catalana, que le reconocía su implicación con la ciudad.