Analizamos las características de Hoka Cielo X1 2.0 la zapatilla de running “racer” más radical de esta marca americana. Si Hoka sorprendió la temporada pasada con Cielo X1 como nuevo modelo, el éxito los ha llevado a sacar su segunda versión. Y, como hemos visto, dado el buen rendimiento de la zapatilla, ahora sólo han tenido que mejorarle algunos puntos.
Así, vamos a ver que en esta Cielo X1 2.0 se mantiene la línea general de la zapa original, pero hay elementos que sí cambian. Le han abierto la malla para que sea más transpirable que su predecesora X1. También el dibujo de la suela ha sido modificado para lograr mayor tracción. Otra parte menos visible, pero también retocada es la mediasuela, fabricada en PEBA. Ahora llega con un pelo más de sensación de balancín y un antepie que mejora la amortiguación.
La idea de este modelo unisex (ojo, lo mismo para hombre que para mujer, así que la variedad de colores va a ser algo más limitada) es que ayuden a correr lo más veloz posible. Es una zapatilla de competición al 100%, lo que también se conoce como una “voladora”. Y por supuesto que lleva placa de carbono. La razón de ser de Cielo X1 2.0 sólo puede ser competir en asfalto, o usarla en sesiones donde trabajar la velocidad o mismas situaciones de carrera. ¿Esto es así? ¡Hay que empezar a explicarla ya!
Mediasuela
La mediasuela de Hoka Cielo X1 2.0 es sin duda la estrella de este modelo por la cantidad de tecnologías que acumula. Es un modelo de competición que aspira a exprimir lo mejor de cada un@ y por eso la marca americana la estira al límite. Aunque hay uno que no lo traspasan: los 40mm de World Athletics para homologar (o no) récords con cualquier zapatilla. Pues bien, Hoka Cielo X1 2.0 llega hasta 39mm (en el talón) y 32mm (en el antepie). Esto, aparte de dar un drop de 7mm, significa que aquí el único límite lo ponen las piernas que vistan este modelo.
El material con el que está construida la mediasuela es PEBA para darle una amortiguación con una alta dosis de respuesta. O lo que es lo mismo: amortigua los impactos contra el suelo y, además, reacciona rápidamente a ellos. PEBA es un elastómero termoplástico (en concreto PeBa®, o poliéter amida en bloque) que posee otra interesante habilidad: la resistencia frente al desgaste… O sea: tiene mayor durabilidad. Hoka además, utiliza dos densidades diferentes y juega con ellas para sacarle el máximo rendimiento a esta Cielo X1 2.0.
Espuma PEBA + Placa de fibra de carbono:
Entre esas dos diferentes densidades (en el despiece serían la espuma azul y la blanca), localizamos una placa de fibra de carbono. Está reforzada porque aquí lo que buscan es exprimir al máximo el rendimiento para lograr la mayor velocidad posible. Así, sin más… todo por la competición.
Para complementar la acción del material amortiguado y la placa de fibra de carbono (hay que tener en cuenta que este tipo de construcciones no son nada flexibles) llega Meta Rocker. Ya hemos hablado otras veces de él, y Hoka le tiene pillado el gusto a esta tecnología que se basa en la curvatura de la suela y mediasuela. Esto es tan “sencillo” como que, el talón y la puntera tienen una curvatura mucho más marcada de lo habitual. Con este recurso, la marca americana pretende lograr mejorar la transición de la pisada. Es decir, la propulsión y, por tanto, la velocidad (todo va a parar a lo mismo aquí).
Más tecnologías en la mediasuela: Active Foot Frame. Ésta permite que, al impactar contra el suelo, al correr, el pie se “hunda” de manera controlada en el material amortiguado. Es decir, que a pesar de ser una zapatilla para pisada neutra, Hoka no deja de lado aportarle un mínimo de estabilidad en la pisada. La novedad aquí es que Active Foot Frame está enfocado en la zona del antepie (y no atrás), pero esto es lógico en una zapatilla que la van a exprimir más quienes corran de metatarso (y entre ell@s destacan quienes suelen ir a 3’ el mil, o alrededores).
Suela
La suela de Hoka Cielo X1 2.0 incorpora un tipo de goma adherente para mejorar el agarre y favorecer la tracción en carrera. Vemos que el diseño es bastante espectacular a la vista, con enormes aberturas y zonas sin caucho, pero, como todo, existe una explicación para ello.
Si vamos a por las grandes áreas sin goma sólida, esto tiene una explicación lógica que es la reducción de peso. El caucho es el material más pesado en una zapatilla de correr, pero sin esa protección de la suela, no durarían mucho… Así que en este caso, como en las zapatillas de competición lo que importa es la velocidad y la importancia de la durabilidad pasa a ser relativa…, esto hay que optimizarlo.
Los fabricantes se devanan los sesos para ver en qué zonas de baja o nula utilización podría rebajar o eliminar este refuerzo. Así, si giramos esta Cielo X1 2.0 vamos a ver que la zona con mayor necesidad de tracción, como es bajo los metatarsos, el caucho es abundante, buscado contacto con el suelo. En cambio, en el talón y en el medio pie, apenas está presente. Esto no sucede en las zapatillas de entrenamiento diario, porque allí normalmente se entra de talón, al correr.
Huecos en la suela:
Pero vemos algo más y que deberíamos haber explicado en el apartado de la mediasuela. Y lo haremos aquí, ya que sólo es visible desde la suela: las grandes aberturas, el vaciado de material, de la mediasuela en el centro del pie, bajo el arco plantar y entre los dedos. Esto es por dos motivos… El práctico: reducción de peso. El de márquetin: que se vea la placa de fibra de carbono. Pero ojo, no lo decimos de manera despectiva, todo lo contrario. Y es que los fabricantes sienten la necesidad de transmitir que tal o cual zapatilla lleva placa de fibra de carbono.
Es un complemento importantísimo y que, si no se viera a simple vista, podría restarle una buena valoración de alguien a la hora de decidirse, o no, por hacer la compra.
Volviendo al material, que sea adherente es más importante de lo que parece. Porque no sólo ha de poder agarrarse bien en el sentido de correr, y que a un pie le siga el otro y así… No es suficiente: tiene que devolver un buen feeleing. Que el o la atleta realicen los giros con confianza y seguridad. Que cuando pisen un paso de peatones, especialmente en curva, sigan dándolo todo y no reduzcan porque tienen la sensación de que se les van los pies. Ese es el trabajo de Hoka poniéndole esa goma adherente en la suela.
Upper
El upper de Hoka Cielo X1 2.0 es otro de los responsables de la bajada de peso en el global de la zapatilla. Utiliza una malla tipo Jacquard precisamente para, no sólo aportarle confort y transpirabilidad, sino que esto lo haga de manera ligera.
El tejido Jacquard suele ser muy cómodo al tacto, algo ideal desde el punto de vista del confort. Lo que pasa es que una zapatilla de competición ha de soportar más tensiones por la propia carrera. Por eso Hoka le ha añadido a Cielo X1 2.0 una muy (pero que muy) fina capa de material serigrafiado en 3D a modo de refuerzo. Es fácilmente reconocible porque son unas rayas verticales desde lo alto de la zapatilla hasta la misma inserción en la mediasuela.
Los cordones son planos y están pasados por apenas cinco ojales. Hoka deja un sexto libre pegado al tobillo, por si alguien quiere aumentar el apriete en esa zona. Están pasados por una lengüeta que ha sido fabricada con un 100% de poliéster reciclado.
El cuello del talón está suficientemente acolchado, más incluso de lo previsible en una zapatilla voladora, algo que se agradece. Quizás el ingeniero que manejaba la tijera reductora de peso no lo vio… O quizás pensó que ya se lo habían bajado lo suficiente a esta versión respecto a su predecesora X1. También podría ser…
Resumen
Hoka Cielo X1 2.0 es una zapatilla de competición con todo lo necesario para sacarle el máximo rendimiento y que ayude a correr con la mayor velocidad posible sobre el asfalto. Es extraordinariamente ligera (228g), es unisex y cumple con la reglamentación de World Athletics para homologar cualquier resultado obtenido con ellas.
Para lograr todo eso se vale de una mediasuela de dos capas y doble densidad que incluye en su interior una placa de fibra de carbono de longitud completa. El material amortiguado es PEBA, lo que le da una alta respuesta en carrera además de una gran durabilidad. La mediasuela también incorpora tecnologías como Metarocker (para mejorar la transición y salida en la pisada) o Active Foot Frame (más enfocada al comportamiento del pie, especialmente en el momento de impactar contra el suelo, al correr). La altura de la mediasuela es de 39mm y 32mm (talón/antepie), por lo que el drop es de 7mm.
La suela presenta vaciados de material para ayudar a rebajar el peso, pero en la zona donde tiene más (antepie) es de una alta adherencia para una alta tracción. Por arriba, en el upper, la malla es muy cómoda, transpirable y confortable. Es del tipo Jacquard y presenta refuerzos serigrafiados en 3D por toda ella. Éstos han de ayudar a sujetar al pie, debido a las grandes tensiones que sufren las zapatillas que son llevadas a ritmos muy altos.
El precio oficial de Hoka Cielo X1 2.0 es de 275€.





