La española María Pérez, doble campeona mundial en Budapest 2023 (20 y 35 km marcha), inicia este sábado la defensa de su corona en el Campeonato Mundial de Atletismo de Tokio 2025 con el cartel de favorita. La granadina llega a Japón “en un buen momento de forma, incluso mejor que en los Juegos”, aseguró en una entrevista con EFE.
La final de los 35 km marcha femenina abrirá los campeonatos el sábado 13 de septiembre a las 10:00 hora local (03:00 en España), una distancia en la que Pérez encabeza la lista mundial de la temporada gracias al 2:38:59 logrado en Poděbrady, en el Campeonato Europeo de Marcha por Equipos.
Rivales de primer nivel
La atleta de Orce tendrá enfrente a un elenco de rivales de talla mundial. La peruana Kimberly García, doble campeona en Oregón 2022 (20 y 35 km), vuelve a presentarse como uno de las grandes rivales. Aunque este año llega con un mejor crono de 2:45:59 (14.ª en el ranking), su marca personal de 2:37:44 y su experiencia en grandes citas la mantienen en la órbita de las medallas.
La italiana Antonella Palmisano, campeona olímpica de 20 km en Tokio 2021, figura como segunda en la lista mundial con 2:39:35 y será, según la propia Pérez, la rival más peligrosa: “La rival más dura será Antonella Palmisano en las dos distancias, sin descartar a alguna china”, reconoció la española.
Entre las aspirantes también destacan la china Ma Li (2:40:49), las italianas Nicole Colombi (2:41:47) y Eleonora Giorgi (2:41:54), la mexicana Alegna González, autora del récord norteamericano (2:44:28), o la ecuatoriana Paula Torres (2:44:26).
Una María más madura
La marchadora española regresa a Japón cuatro años después de quedarse a las puertas del podio en los Juegos Olímpicos de Tokio, disputados en Sapporo, donde fue cuarta en los 20 km. “Vuelvo a Japón y espero vivir una situación diferente. Quiero disfrutar… ahora hay una María más madura, más responsable de saber lo que quiere en cada momento”.
El recuerdo de su compañero y amigo Álvaro Martín, ya retirado, también acompaña a Pérez en esta cita. “Echo mucho de menos a Álvaro Martín. Piensa que son muchas concentraciones juntos y muchas competiciones”, confesó.
Lejos de sentirse presionada, la campeona del mundo afronta la prueba con tranquilidad: “No siento presión, estoy a gusto y tranquila. Sé que ahora puedo tener la mirada a nivel internacional pero esto es parte del proceso, del juego y hay que saber gestionarlo”.