En los recientes ‘trials’ de Estados Unidos hubo muchos nombres propios, pero uno sobresalió por encima del resto. Se trata de Cooper Lutkenhaus, el nuevo niño prodigio del atletismo americano que logró billete en los 800 metros para el Campeonato del Mundo de Tokio con apenas 16 años y con un marcón antológico.
Una absoluta barbaridad para este ‘niño’, que fue capaz de bajar su marca personal en más de tres segundos en una actuación casi inédita en la historia. Fue de tal magnitud la actuación de Lutkenhaus que logró cuatro Récords del Mundo en uno: el de los 16 años, 17, 18 y 19. Casi nada. Es decir, que a las 16 años tiene ya en su poder la mejor marca de la historia sub’19 en el 800. Tan solo la estrella Donovan Brazier pudo superarlo.
En Tokio
Si nada se tuerce, veremos a Lutkenhaus compitiendo en ese Campeonato del Mundo de Tokio tras habérselo ganado por merito propio. En la table de equivalencias de marcas, el 1.42.27 que consiguió equivaldría a las siguientes marcas: 9.79 en el 100, 19.58 en el 200, 43.70 en el 400, 3.28.63 en el 1.500, 3.45.32 en la milla, 7.25 en el 3.000, 8:00 en las dos millas, 12.49 en el 5.000 y 26:41 en el 10.000.
En una entrevista reciente, el chico, que ya ha regresado al colegio, ha hablado sobre todo lo que le ha pasado: “Espero que mis profesores de la ‘High School’ me dejen viajar al Mundial de Tokio en septiembre”, dijo tras la carrera de los trials.