El ultrafondista catalán Kilian Jornet afrontará este sábado su gran reto de la temporada, la Western States 100, en California (Estados Unidos), una de las carreras de montaña más emblemáticas del mundo, con 161 kilómetros, que ha preparado con un nuevo método de entrenamiento para adaptar su rendimiento físico al fuerte calor que marcará la prueba. “Un atleta diferente”, fue el rótulo que escogió Jornet en un vídeo publicado hace unos días en sus redes sociales para describir cómo afronta una carrera que ya ganó en 2011, en la única vez que ha participado.
Serán cien millas, con un desnivel positivo de 5.500 metros y 7.000 metros negativo, las que tenga que recorrer Jornet junto a los otros 368 corredores con un sol abrasador como testigo. El ultrafondista catalán se ve “mucho mejor atleta” ahora que hace quince años, porque puede “correr más rápido”, aunque asume que necesita más tiempo para recuperarse y “entrenarse de forma más inteligente”. “Antes, salía a subir la montaña, sin pensar en entrenar, solo en pasar tiempo fuera, mientras que ahora tengo que prepararme de forma específica”, remarca el atleta catalán, de 37 años.
El nuevo Kilian se ha sometido a entrenamientos a 40 grados recluido en la habitación de su casa en Andalsnes, junto al fiordo de Romsdal (Noruega), haciendo bici y cinta estática para sudar y aclimatarse mejor a las duras condiciones que le esperan el sábado, además de para no forzar en exceso la rótula que le ha dado problemas en los últimos meses. En cada sesión, de entre dos y tres horas de duración, ha llegado a perder hasta dos kilos, que compensaba con abundante agua con sodio. La preparación la ha completado con carreras en el exterior, de hasta 80 kilómetros, y salidas a la montaña por “cuestión mental” para mantener la conexión con su entorno favorito.
Preparación
Otro aspecto que ha cambiado en la vida del atleta de Sabadell, emparejado con la sueca Emelie Forsberg, también corredora de montaña, es que a mediados de marzo nació su tercera hija, con la que se la ve en el vídeo acunándola mientras prepara una de las sesiones de bici. “La vida es diferente para mí. Con tres hijas, necesito un enfoque más estructurado para entrenar”, admite el ultrafondista. Jornet ha dosificado su esfuerzo esta temporada y solo ha participado en dos carreras. A finales de marzo, poco después de volver a ser padre, lo hizo en la Toscana italiana, en la Chianti Ultra Trail, de 120 kilómetros, donde logró el billete para la Western States, aunque fue superado por el estadounidense Jim Walmsley, en la primera carrera de largo recorrido que perdía desde 2018.
Como preparación para la cita del sábado, Jornet corrió la Broken Arrow Ascent de California el pasado día 20, una prueba vertical de 4,8 kilómetros en la que quedó en el puesto 23, con un tiempo de 27:27. Su sobresaliente palmarés lo sitúa entre los favoritos para ganar la 52 edición de la Western States 100, pero tendrá competidores de calado, como el francés Vincent Bouillard, ganador del Ultra Trail del Mont Blanc (UTMB) el pasado año y a quien derrotó en la Chianti en el último kilómetro. No correrá finalmente Walmsley, que el pasado año conquistó su cuarto título en la ultramaratón californiana, donde posee el récord, con 14.09:28. La carrera comenzará a las 5.00 hora local en Olympic Valley, donde se disputaron los Juegos de Invierno en 1960, y se completará en la pista de atletismo de Auburn.
