Dentro de todas las hazañas que vimos en el Maratón de Sidney, que fueron desde el récord de la prueba de Sifan Hassan hasta el 2:08 de Eliud Kipchoge cumplidos ya los 40 años, se coló con un protagonismo especial una atleta estadounidense de 77 años que hace tiempo ya que nos deja sin palabras. Hablamos de Jeannie Rice, que volvió a bajar con claridad de las cuatro horas y consiguió una nueva proeza. Sidney, que estrenaba categoría de séptimo ‘major’, veía cómo Rice trituraba la clasificación de su categoría y sacaba nada más y nada menos que una hora y 21 minutos a la siguiente mujer de su rango de edad (75-79 años).
De hecho, Rice consiguió llegar a meta por delante de todos los hombres mayores de 75 años (nadie de esa edad bajó de las 4 horas y ella cruzó la meta en 3 horas, 47 minutos y 48 segundos). La norteamericana rodó a un ritmo espectacular de 5:23/km. Y eso que la prueba de la ciudad oceánica no es especialmente rápida. Rice venía de batir el Récord del Mundo de su categoría en Londres hacía unos meses (3h33:27). Posee también las plusmarcas mundiales de su edad en 1.500, 5.000 y 10.000 metros en pista.
Sin explicación para la ciencia
Tremendo lo que está logrando hace años esta mujer que empieza a ser algo ‘inexplicable’ incluso para la ciencia. Le encontraron hace poco una frecuencia cardíaca máxima de 180, algo impensable y rarísimo para alguien con 77 años. Ha logrado ya la victoria en las siete majors en su franja de edad.