Medida sorprendente la que ha tomado el gobierno gallego respecto al ejercicio al aire libre. Dentro del nuevo paquete de restricciones por el incremento de casos y de incidencia del coronavirus, el ente presidido por Alberto Núñez Feijóo ha acordado este lunes una serie de normas que es obligatorio seguir. “Desde la madrugada del martes y durante tres semanas, solo se permitirá el deporte individual al aire libre. En estos casos la mascarilla será obligatoria siempre, incluso para correr y aunque se puedan garantizar la distancia de seguridad entre personas”.
La parte polémica
Sin duda, esta última parte en la que indica que incluso en espacios abiertos y sin nadie alrededor hay que taparse boca y nariz es la más polémico, puesto que varios estudios han dictaminado que la incidencia del virus en el aire libre es mínima y cuando se establece la distancia de seguridad prácticamente inexistente.
La pasada semana ya se decidían suspender las competiciones a nivel autonómico y los entrenamientos quedaban solo permitidos a nivel individual. Tanto en las nuevas restricciones como en las ya vigentes, todos los deportistas deberán adaptarse al cierre perimetral de cada localidad y al toque de queda a las 22 horas.
Continúa esta pesadilla que, como vemos, está lejos de ver la luz al final del túnel y que cuando parece que se relaja y que se suaviza, nos vuelve a golpear con más virulencia si cabe. Obviamente todo viene por las aperturas y los cierres originados por las tres olas que llevamos, encontrándonos ahora en la parte más crítica (esperamos) de la última de ellas. “Son medidas más difíciles y con más restricciones que las adoptadas hasta ahora” ha asegurado el presidente de la Xunta.