Quince meses después de aquel revés sufrido en los Juegos Paralímpicos de París, en los que se quedó sin el bronce tras una descalificación, la catalana Elena Congost vuelve a sonreír. En el reciente maratón de Valencia batió el récord de Europa (2h54:36) para deportistas con discapacidad visual y se reivindicó, junto a su guía Roger Sans, como una de las mejores atletas del mundo en un año especialmente duro por el diagnóstico de un tumor en el nervio óptico.
Elena Congost, de 38 años, regresó a lo grande en Valencia. Lo hizo con un récord de Europa, la mejor marca de 2025 para deportistas con discapacidad visual y la segunda mejor marca de la historia. El récord mundial lo tiene la marroquí Fatima Ezzahra El Idrissi, que lo estableció en los Juegos Paralímpicos de París 2024 (2h48:36).
En Valencia, Elena Congost volvió a disputar un maratón tras hacerlo por última vez el 8 de septiembre de 2024 en los Juegos de París. Aquel día entró tercera junto con su guía Mia Carol Bruguera, que cruzó la meta tras sufrir calambres en los últimos metros en 3h00.48. En esos últimos metros, Congost soltó un segundo la cuerda como acto reflejo para que no se cayera su guía, lo que provocó la descalificación por parte del Comité Paralímpico Internacional, que aplicó a rajatabla la norma pese a que esa acción no influyó en el resultado final, ya que la siguiente atleta, la japonesa Misato Michisita, llegó casi cuatro minutos más tarde.
Los argumentos de Para Athletics y del Comité Paralímpico Internacional no convencieron a Elena Congost, que empezó una batalla legal que escribirá su próximo capítulo el 23 de marzo. La representa Jean-Louis Dupont, el abogado que cambió el fútbol europeo con el caso Bosman. “Tenemos una vista en París ese día pero no sé lo que me espera. Al menos son buenas noticias porque parece que algo se mueve”, declara a EFE la atleta catalana, que reconoce estar “muy contenta” tras el éxito cosechado en Valencia.
“Muy satisfecha”
“Al final por una cosa o por otra no había bajado nunca de las tres horas y venía con la espinita de lo ocurrido en París. Entran dudas porque además era la primera vez que corría con Roger Sans como guía. Aunque hemos entrenado juntos sabemos que un maratón te pone muy al limite. Supimos como solventar lo de París y me siento satisfecha por el trabajo hecho y porque después de todo lo ocurrido necesitaba demostrar al Comité Paralímpico y a todo el mundo que me había ayudado que valíamos un buen tiempo”, aseguró.
En Valencia, Elena Congost se estrenó en competición oficial con Roger Sans de guía, que sustituyó a Mia Carol, con el que estuvo en París. “Después de París teníamos que renovar beca porque el Comité me informó que me la daba como si fuera bronce y ahí es cuando tienes que elegir entrenador y guía. Con Mia, antes de París, ya había hablado de cambio y tenía que escoger otra persona. Roger, que fue mi nutricionista todo el año de París y es un atleta muy bueno, iba a dar el salto de maratón y al segundo me dijo que sí”, desvela. “Ha sido un acierto porque, primero tiene mucha calidad deportiva y, segundo, porque a nivel humano nos entendemos mucho, tiene la misma forma de ver la disciplina como yo, y además me lleva la nutrición”, señala.
El tumor
Llegar a Valencia, rendir a ese nivel y, sobre todo, seguir demostrando que está en la élite del atletismo paralímpico no ha sido fácil. Hace solo siete meses, en mayo de este 2025, anunció que padecía un tumor. “Ha sido complicado al principio. Todo empezó al principio porque tenía mucho dolor de cabeza y vómitos. No lo asociaba a nada. Incluso en algún momento pensé que podía estar embarazada. Hicimos un TAC y una resonancia y se encontró lo que había. Cuando pude solucionar este tema me encontré mejor y al final pude entrenar bien”, apunta. “En verano me hicieron una pequeña intervención y fue más fácil de lo que pensábamos. A partir de ahí a nivel físico he ido mejor y a nivel emocional ha sido dura. Soy una persona fría en ese sentido, sé guardarme las cosas para mí y cuando voy a entrenar sé separar mi yo personal del profesional y por otro lado entrenar me da la vida, es lo que me apasiona y lo es todo”, dijo.
A medio plazo, su objetivo principal son los Juegos Paralímpicos de Los Ángeles 2028. “Es la prioridad desde el minuto uno que pasó lo de París”. “Cada día nos levantamos con la vista puesta en ello. Es cierto que se hace largo el ciclo pero necesitaba un objetivo intermedio. Cuando surgió la posibilidad de Valencia no me lo pensé. Era una oportunidad y además también una buena ocasión para demostrar al Comité Paralímpico que estoy trabajando bien. Me he quitado un peso de encima”, concluye. Elena Congost ha disputado cinco Juegos Paralímpicos desde Atenas 2004. En Londres 2012 se llevó la plata en 1.500, clase T12, y en Río de Janeiro 2016 tocó la gloria con el oro en maratón.


















































