Estos próximos 13 y 14 de septiembre se disputa en Bruselas el Memorial Van Damme, donde se vivirán las grandes finales de la Diamond League. La mejor competición de atletismo del planeta (con permiso de los Juegos Olímpicos) congregará a los y las mejores atletas en dos días de competición sencillamente brutales en la capital belga.
Tras un sinfín de meetings entre el pasado mayo y este mes de septiembre, con unos Juegos Olímpicos de por medio, Bruselas servirá para dirimir quién se llevará el ansiado diamante. Los atletas se han clasificado durante la competición acumulando puntos. Por ejemplo, Sidney McLaughlin no tenía los puntos necesarios (compite muy poco y ni siquiera la habíamos visto durante la competición) y la organización ha decidido crear dos pruebas fuera del calendario Diamond para que pueda participar. La veremos correr un 200 y un 400 lisos, pero no competirá con los mejores, sino con una serie de atletas invitados. Veremos de lo que es capaz la plusmarquista mundial de 400 vallas.
Suculentos premios
Más allá de los diamantes, lógicamente los atletas van a Bruselas en busca de dinero. Si hasta ahora en cada meeting los ganadores de las pruebas se llevaban 10.000 dólares (6.000 el segundo, 3.500 el tercero, 2.000 el cuarto, 1.250 el quinto, 1.000 el sexto, 750 el séptimo y 500 el octavo), en las finales se repartirán 60.000 dólares por prueba: 30.000 para el ganador, 12.000 el segundo, 7.000 el tercero, 4.000 el cuarto, 2.500 el quinto, 2.000 el sexto, 1.500 el séptimo y 1.000 el octavo.
Un buen pellizco que no viene nada mal para cerrar la temporada. Además, los ganadores se llevarán una ‘wild card’ para el próximo Campeonato del Mundo.